11 de enero: Ruegue a Dios por los esfuerzos de prevención y por quienes son vulnerables.

Oración de intercesión

Por los inocentes que sufren el abuso pecaminoso de la esclavitud, y por la conversión de las almas perdidas que los mantienen cautivos y los explotan. Roguemos al Señor.

Para reflexionar

• La trata de personas ocurre en todas las comunidades. Eso significa que cada uno de nosotros puede hacer algo para detenerla. Como ha dicho el Papa Francisco: “La trata de seres humanos es una llaga en el cuerpo de la humanidad contemporánea, una llaga en la carne de Cristo”.
• La trata de personas ocurre en las grandes ciudades, en los suburbios y en los pueblos pequeños.
• La trata de personas se confunde a menudo con el tráfico de personas, que implica cruces fronterizos ilegales. De hecho, el delito de trata de personas no requiere movimiento alguno. Los sobrevivientes pueden ser reclutados y traficados en sus propios lugares de origen, incluso en sus propios hogares.
• Hay tres tipos de trata de personas: trata sexual, trabajo forzoso y servidumbre doméstica.
• Paradas de camiones, hoteles y casas particulares se encuentran entre los lugares donde se vende a las personas para fines de sexo comercial.
• El trabajo forzoso es aquél que las víctimas llevan a cabo por poco o ningún salario. Las fábricas, granjas y sitios de construcción son lugares donde las personas se ven obligadas a fabricar productos o alimentos que consumimos por poca o ninguna compensación.
• La servidumbre doméstica incluye niñeras, sirvientas o ayudantes domésticas. A menudo a estas esclavas modernas se les oculta a plena vista y se las retiene contra su voluntad porque los traficantes les quitan sus documentos de identidad y de viaje.

Llamado a la acción

Revise estas diez formas de acabar con la trata de personas: https://www.acf.hhs.gov/otip/about/ways-endtrafficking. ¿Cómo puede ayudar a poner fin a la trata de personas?

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